No cabe duda de que el futbol es un detonante social en cualquier parte del mundo; incluso, se dice que es una religión, y los aficionados la viven como tal. El mejor ejemplo de ello es la forma en que el deporte más famoso del mundo se vive en Escocia, en concreto, en el legendario Celtic Park, de Glasgow.

 

Una obra de caridad realizada a finales del siglo XIX por el hermano Wilfred, un religioso marista, convirtió al equipo escocés en ‘El club católico de Europa’, así como en uno de los más reconocidos en todo el mundo.

 

Apoyado en su gran mayoría por inmigrantes irlandeses, los llamados Hoops llevan los colores de su equipo en el corazón, y aunque no son parte de la capital del país, los aficionados convierten a Glasgow en el centro de atención del futbol en este país.

 

Entre otras tradiciones, destaca el cántico ‘You’ll never walk alone’, extraído de una obra teatral y que es reconocido por ser el himno de guerra de los aficionados del Celtic; incluso, en partidos importantes, como en los clásicos ante el Rangers, todo el Celtic Park ruge mientras los seguidores, de manera monstruosa, recitan, con el corazón en la mano, cada uno de los versos de este cántico.

 

No obstante, pese a que en recientes años la afición escocesa ha recibido numerosos reconocimientos por parte de la UEFA por su buen comportamiento, la pasión a veces es llevada al extremo por estos aficionados, quienes, al ser declarados católicos, han tenido enfrentamientos con los protestantes de la ciudad, como los son los seguidores del acérrimo rival, el Rangers, situación que ha derivado en más de una batalla campal entre ambos grupos de seguidores.

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

Por si fuera poco, el odio que se tienen ha llegado a cobrar la vida de personas, las cuales llevan el fanatismo al extremo. Precisamente por ello, los clubes tuvieron que erradicar al sectarismo que en algunos sectores comenzó a generarse a mediados del siglo pasado.

 

Además, a pesar de no ser el equipo más laureado de su país, (siendo superado precisamente por el rival de la ciudad, el ahora descendido Rangers), el Celtic goza de gran popularidad, inclusive fuera de la isla británica. De hecho, el conjunto verdiblanco ha logrado afianzarse como el equipo más popular fuera de Escocia.

 

Inclusive, la pasión por el equipo verdiblanco es tan grande que hasta hermandades se han formado entre aficionados del Celtic y seguidores del St. Pauli, de Alemania, o del Villarreal, perteneciente al fútbolespañol.

 

Recientemente, el club cumplió 125 años de historia, y lo hizo de una manera que sin duda será inolvidable, derrotando al ‘todopoderoso’ Barcelona, en la Liga de Campeones, todo bajo el aliento de su afición, que tiene sus raíces en la solidaridad y en la bondad, cualidades que con el paso del tiempo se han transformaron en pasión, desbordamiento, júbilo y amor incondicional por sus colores.